Un amable lector (¡Gracias,
Güimi!) nos remite este texto, traducido por él, acerca de por qué este año va a tener un segundo más de lo habitual. Como es insuperable, pues lo citamos tal cual.
Su artículo:
Al acabar el año 2005, se va a introducir un salto de un segundo en la escala internacional de tiempo, conocido como tiempo universal coordinado o UTC. El encargado de realizar el anuncio fue el Servicio Internacional de Sistemas de Referencia y Rotación de la Tierra, el IERS (International Earth Rotation and Reference Systems Service), un organismo internacional situado en el observatorio de París y que es el responsable de recoger y combinar las medidas de la rotación de la tierra realizadas en observatorios de todo el mundo.
Existen varios sistemas de medida del tiempo y habitualmente se dividen formando días de 24 horas, de 60 minutos, de 60 segundos.
La base de los sistemas tradicionales ha sido el movimiento de la tierra sobre su eje, formando días y noches, y el movimiento de la tierra alrededor del sol, formando años. Como es evidente que la longitud del día y la noche solar varía a lo largo del año, y que el sol no pasa todos los días por el mismo punto, se hizo necesario definir un día solar medio. Así hasta 1925 el sistema más utilizado era el "Horario Medio de Greenwich" o GMT (Greenwich Mean Time) en el que el sol de mediodía, en promedio anual, está sobre el meridiano de Greenwich (longitud cero) a las 12:00:00. En 1925 se cambio la referencia del día de mediodía a medianoche, dando lugar al tiempo universal o UT.
Dado que el tiempo universal se basa en los movimientos celestes, podemos llamar segundo astronómico al que mide el tiempo universal.
A lo largo del tiempo la exactitud en la medida del tiempo ha ido mejorado constantemente, lo que permitió descubrir irregularidades en la rotación de la tierra. En efecto, la duración de los segundos astronómicos varía ligeramente con los cambios en la rotación de la tierra. En 1955 el primer reloj atómico, que era mucho más regular que la propia tierra o que cualquier otro tipo de reloj existente, se puso en marcha en el NPL (National Physical Laboratory) de Reino Unido. Construido por Louis Essen y Jack Parry, se basaba en una vibración particular del Cesio-133. A lo largo de los siguientes años la frecuencia del reloj de Cesio del NPL fue comparada con el segundo astronómico calculado por el Observatorio Naval de Estados Unidos (USNO), y, como resultado de este trabajo, en 1967, por acuerdo internacional, el segundo fue definido en el Sistema Internacional de Unidades de Medida (SI) como la duración de 9.192.631.770 períodos de la vibración elegida del átomo de Cesio-133.
El segundo SI, que se supone de duración constante bajo determinadas condiciones fijas, se utiliza para hacer una escala de tiempo llamada Tiempo International Atómico o TAI, y simplemente cuenta los segundos SI usando minutos, horas y días.
La cuestión es que el TAI (basado en el tiempo constante marcado por el Cesio 133) ya no está ligado a la rotación de la tierra, por lo que un reloj y un calendario basados en él van quedando gradualmente desfasados con el UT (basado en el tiempo variable marcado por el movimiento de la tierra). Así pues un calendario TAI es poco práctico para los navegantes, los astrónomos y en general cualquiera que desee que su reloj esté en consonancia con el sol en el cielo.
La solución adoptada fué construir una escala de segundo de tiempo atómico llamada Tiempo Universal Coordinado, que se abrevia en todos los idiomas como UTC, y que es la base internacional de medida del tiempo. El sistema UTC combina la regularidad del tiempo atómico con muchas de las ventajas del UT (o GMT), y muchos países la han adoptado como la base jurídica de tiempo. El UTC se basa en el segundo atómico del TAI, pero se ajusta regularmente para mantenerlo cercano al UT, por medio de la inserción de segundos adicionales cuando es necesario (lo que se conoce como saltos positivos de segundo). Podría suceder que se necesitase quitar un segundo (saltos negativos de segundo), pero hasta ahora todos los saltos de segundo han sido positivos. El UTC se mantiene siempre en un margen de 0.9 segundos respecto al UT.
Cuando se inserta un salto de segundo, se hace en el último minuto de Diciembre o de Junio, o excepcionalmente en Marzo o Septiembre, a medianoche (a las 24:00 horas UTC). La decisión de si es necesario un salto de segundo se toma en el Centro de la Orientación de la Tierra del IERS, con aproximadamente 6 meses de antelación.
A continuación, un ejemplo de la secuencia de segundos en torno al salto de segundo (con fecha y hora UTC):
31 de Diciembre de 2005 - 23h : 59m : 58s
31 de Diciembre de 2005 - 23h : 59m : 59s
31 de Diciembre de 2005 - 23h : 59m : 60s
01 de Enero de 2006 - 00h : 00m : 00s
01 de Enero de 2006 - 00h : 00m : 01s
En un minuto con un salto de segundo hay 61 segundos.
Los saltos de segundo ocurren en el mismo instante en todo el mundo, haciendo que la familiar señal de radio de seis pitidos gane un pitido adicional antes del pitido largo que marca la hora.
El 01 de Enero de 1972 se calculó la diferencia entre el tiempo TAI y el UTC en exactamente 10 segundos. Desde entonces la diferencia se va acumulando conforme al registro siguiente. Cada fecha es el día UTC inmediatamente posterior al salto de segundo y a continuación se indica la diferencia de segundos acumulada entre los tiempos TAI y el UTC. La diferencia significa que el tiempo TAI va 'adelantado' respecto al UTC.
1972-07-01 11s
1973-01-01 12s
1974-01-01 13s
1975-01-01 14s
1976-01-01 15s
1977-01-01 16s
1978-01-01 17s
1979-01-01 18s
1980-01-01 19s
1981-07-01 20s
1982-07-01 21s
1983-07-01 22s
1985-07-01 23s
1988-01-01 24s
1990-01-01 25s
1991-01-01 26s
1992-07-01 27s
1993-07-01 28s
1994-07-01 29s
1996-01-01 30s
1997-07-01 31s
1999-01-01 32s
2006-01-01 33s
Categorías: Astronomía