Leo en
Reuters (uno tiene gustos raros, pero hay un motivo que espero poder explicarles en breve a mis lectores) que José Saramago ha escrito una novela en la que la Muerte se declara en huelga. En palabras del autor:
La historia describe a la Muerte como a una mujer que se declara en huelga porque está harta de ser odiada por la gente. El caos se desata. Los hospitales se llenan, las personas envejecen sin morir y el sistema de pensiones se sobrecarga. En poco tiempo, la Iglesia comienza una campaña para que la Muerte regrese.
¡Vaya! En el último libro que leí de Pratchett (lo comentaré la semana que viene), a la Muerte le comunican que ha sido despedida; la gente deja de morir. El mundo se llena de no-muertos y, efectivamente, comienza a cundir el caos. Pero estoy seguro de que el libro de Pratchett es más divertido. Un nuevo ejemplo de
tramatomía comparada en CPI...