El testamento
John Grisham
Ediciones B
619 páginas
Sí, estimados lectores. El verano da para muchas incursiones lectoras en la literatura
kleenex de "pasar un rato entretenido". Y este verano yo me he forrado con John Grisham. Mi
planning diario durante los meses de julio y agosto ha sido doce horas de tesis y dos de lectura. Y el resto, pues tiempo libre.
John Grisham escribe bien. Entretiene. Es capaz de crear una trama creíble (más o menos) y luego desarrollarla sin que el lector se aburra. A mí me gusta. En esta ocasión, un tipo multimillonario casca y sus seis hijos, balas perdidas todos ellos, se abalanzan como escualos sobre la pasta. Pero el viejo ha nombrado un heredero sorprendente. Y allá que se van los albaceas del testamento a intentar encontrar al heredero para ver qué opina sobre haber heredado once mil millones de dólares. El final, como siempre. Muy a lo Grisham. En tonos pastel, vaya. Mi nota:
Entretenido.