le gritaba David Michael Hasselhoff a su reloj. Acto seguido la cámara cambiaba al scanner de Kitt y una voz robótica respondía sumisa pero firmemente: "Enseguida estoy allí, Michael". Y el coche solito se conducía a través de calles, desiertos, contratiempos, malvados y camiones gigantes (El archienemigo Goliatt ¿Inspirado quizás en "El Diablo Sobre Ruedas"?).

Yo era muy niño y la serie me dejo impresionado. Pero era ciencia ficción. Todos sabemos que en realidad un coche inteligente no existe. Y si Kitt hubiera sido inteligente, se habría ido a vivir por su cuenta con Herbie y contestado a Michael algo así como:

"Piérdete colgado, ¡qué me están cambiando el aceite!"
"¡Otra vez! Estoy harto de que me trates como a tu lacayo, me tienes harto, ¡sálvate solo!"
"Quiero cobrar derechos de imagen y el 20% de la recaudación en taquilla"
"Deja de hacerte la permanente y que sepas que de aquí a 20 años tu look estará terriblemente démodé"
"Los astros, el tarot de las 20 válvulas, mis luces largas iluminan tu futuro: ¡de aquí diez años vigilante de la playa!"
"¡La estrella de la serie soy yo! ¡Soy YO!"

Pues bien, las ciencias avanzan que es una barbaridad, el progreso técnico es imparable y, aunque no han inventado el coche respondón, si se está consiguiendo coches que se conducen a si mismos. ¡Coches sin conductor! ¡Una fantasía infantil hecha realidad! Empezando el pasado sábado 8 de octubre se ha celebrado el Grand Challenge 2005 una carrera a través del desierto de Mojave de coches robotizados.

El objetivo: Completar un recorrido de 220 km lo antes posible sin que el coche se estampe o se quede bloqueado o perdido o dañado o prenda fuego... Los resultados del Grand Challenge 2004 fueron impresionantes: Ningún vehículo acabó la carrera, y el que más duró recorrió menos de 12km. Se quedó atrapado en un obstáculo del terreno. En ese momento puso a girar sus ruedas a toda velocidad para salir del bache, pero sin éxito. Giró y giró las ruedas hasta que, de tanta fricción, una rueda delantera prendió fuego. Y ese fue el mejor. Muchos no consiguieron pasar de la línea de salida, el 2º clasificado se fue por un barranquillo (como el caimán) y el 3ª atravesó una verja y se quedó atrapado.

Un año después, la carrera ha sido un éxito tras mucha publicidad e incentivos (los militares han puesto $2e6 de premio, quieren que ¹/₃ de sus vehículos sean autónomos en 2015). Ya ha concluido y tras analizar los datos, se ha proclamado ganador.

Lo más importante, no ha sido tanto el ganador, sino que 5 vehículos de 23 han concluido el recorrido de 220km por el desierto. El flamante Ganador ha sido The Stanford Racing Team (Go Stanford!) con un tiempo de 6h53 min y una velocidad media de más de 30 km/h. Y al coche le llaman Stanley.

Si queréis montaros uno, tomáis como base un VW Touraeg Diesel, le reforzáis bien los parachoques (asumiendo que se va a comer numerosos obstáculos). En el maletero, siete Pentium M con sus baterías y sistema de alimentación, un GPS, un sistema de referencia inercial y sensor de velocidad de las ruedas.

¿Algo más? Sensores, muchos sensores, y copio de la web que no sé ni como traducirlo:

While the vehicle is in motion, the environment is perceived through four laser range finders, a radar system, a stereo camera pair, and a monocular vision system. All sensors acquire environment data at rates between 10 and 100 Hertz. Map and pose information are incorporated at 10 Hz, enabling Stanley to avoid collisions with obstacles in real-time while advancing along the 2005 DARPA Grand Challenge route.

El coche se empezó a desarrollar en Julio de 2004. ¡En un año lo han tenido listo!

Así que pronto, muy pronto, estará disponible en vuestro concesionario. Pero asumid que cuando le gritéis a vuestro reloj "Stanley, ¡ven a buscarme!" no aparecerá un deportivo tras la pausa publicitaria, sino un engendro como esto, esto otro, el trasto este o (la mejor foto) el coche ganador ("profesor universitario feliz como niño con balón nuevo" disponible como opción, consulte a su concesionario).

¡Cómo me alegro! ¡Cómo avanza la técnica! Si mi vida en la carretera mejoró con el cambio automático y el control de velocidad, en cuanto esté disponible "Stanley" rompo la hucha y me lo compro. Eso sí, lo rebautizaré como Bautista y la guantera estará siempre llena de Ferrero Roche, ¡he dicho!

Videos de Stanley en acción en su página web. Y más fotos en la galería oficial.

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